Adiós CHAVELA VARGAS...
La cantante Chavela Vargas recibió hoy el último adiós en el emblemático Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México, ese que tantas veces la vio cantar, en un sentido homenaje póstumo en el que no faltaron los mariachis y las rancheras.
Admiradores, amigos y personalidades de la cultura y la política acudieron a este emotivo acto, el segundo que se organiza tras su muerte, el pasado domingo, para despedir a la cantante de origen costarricense también conocida como "La Chamana".
"Su obra y su gran personalidad hicieron que se convirtiera en una de las figuras más importantes de la música mexicana (...). Quienes trabajamos y compartimos este Palacio, la recordamos como una de las grandes intérpretes", aseguró la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, Teresa Vicencio.
Tal y como estaba previsto, en torno a las 13.00 hora local (18.00 GMT) el cortejo fúnebre hizo su entrada en el salón principal de este recinto, decorado con una gran alfombra roja y con varias coronas de flores blancas, acompañado de mariachis que interpretaron "El último trago", de José Alfredo Jiménez.
Al igual que en el homenaje que recibió ayer en la Plaza Garibaldi, el ataúd apareció cubierto con un poncho a rayas azules y blancas con borde rojo, en recuerdo a la prenda que acostumbraba vestir la intérprete y que también le hizo merecedora del sobrenombre de "La dama del poncho rojo".
Un vídeo proyectado en varias pantallas de la sala en el que Chavela Vargas interpreta la conocida obra "Macorina" desató los aplausos y los vítores de los asistentes, entre quienes estaban su amiga y biógrafa María Cortina o los músicos que acompañaron a la artista los últimos diez años, Carlos Allende y Miguel Peña.
Como anfitriona, Teresa Vicencio tuvo unas palabras de bienvenida en las que recordó a la artista y su última visita a Bellas Artes en abril pasado, cuando ofreció un concierto en homenaje al poeta Federico García Lorca acompañada por la cantante Martirio y Eugenia León, "en el que México y España se encontraron".
A pesar de la "tristeza" por la marcha de Chavela, Vicencio precisó que se va con "gran orgullo y dignidad" y será recordada como una "mujer que hizo de su vida una acción firme y decidida", y dirigiéndose a ella concluyó: "bienvenida a tu casa".
Cortina, con la voz quebrada por el llanto contenido, agradeció a los asistentes que acudiesen a despedirla y solo tuvo palabras de admiración y recuerdo para una mujer que, dijo, siempre fue "independiente", incluso "sentada en su silla de ruedas".
Relató que cuando volvían de España, el 26 de julio pasado, Chavela, a pesar de su ya delicado estado de salud, le habló en el avión de un nuevo proyecto para llevar al teatro la historia de "La llorona", una de las canciones más importantes de su vida.
"Me dijo que estaba pensando en que La Llorona no podía ser una canción o una leyenda, tenía que ser un persona de una obra de teatro", recordó.
"A partir de ahora comienza realmente tu leyenda y tu ejemplo a esparcirse por el mundo donde se te quiera", dijo Cortina dirigiéndose a Chavela.
Por su parte, la presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Consuelo Sáizar, destacó su "arrolladora personalidad", su "intensidad para interpretar piezas que volvió únicas" y cómo "cambió la forma en que la canción mexicana se escuchaba en el mundo".
Como ejemplo de su buen humor, recordó que la intérprete hace unos días le confesó que hasta en su funeral se iba a divertir, algo que consideró "se hizo realidad" ayer en la ceremonia de la Plaza Garibaldi, donde cientos de personas se congregaron para despedir a la artista.
Precisamente como en ese primer homenaje, las cantantes Eugenia León, Lila Downs y Tania Liberad volvieron hoy a recordar a la artista a través de sus voces en un concierto en el que no faltaron canciones tan conocidas como "Flor de Azalea" o "Volver, volver".
En las inmediaciones del Palacio de Bellas Artes, enclavado en el centro histórico de Ciudad de México, varias decenas de seguidores hacían fila esperando poder pasar a despedirse de Chavela.
Tras el acto, que concluyó con canciones de despedida como "Ojalá que te vaya bonito" o "Piensa en mí", sus admiradores pudieron pasar a la capilla ardiente a darle el último adiós a Chavela Vargas.